Papel de la colina en la nutrición humana.

La colina es un nutriente esencial para los humanos y está clasificada como vitamina B. Lea nuestra revisión completa para comprender el papel crucial de la colina en la nutrición.

Escrito porJenna Roberts

Publicado2024-01-08

Actualizado2024-10-01

Papel de la colina en la nutrición humana.
Papel de la colina en la nutrición humana.

Introducción

La colina es un nutriente esencial para el cuerpo humano. Desempeña un papel importante en varios procesos fisiológicos cruciales para la salud humana, ya que todas las células de nuestro cuerpo la utilizan. A pesar de la importancia de la colina, en general se subestima su papel en los debates sobre nutrición. [1]

Esta revisión incluye los datos científicos, las funciones fisiológicas, las fuentes alimentarias y las vías metabólicas de la colina. También repasamos los problemas de salud causados por una ingesta inadecuada.

La colina fue reconocida por primera vez como un requerimiento dietético en 1998 por el Instituto de Medicina [2]. Desde 1998, la colina ha sido objeto de gran atención por su importante papel en la salud humana. Es un constituyente de los fosfolípidos, los neurotransmisores y los donantes de metilo, e influye en la estructura celular, la neurotransmisión, el metabolismo lipídico y la regulación epigenética. La colina suele agruparse con otras vitaminas del grupo B.

Funciones fisiológicas

La función principal de la colina reside en la integridad de la membrana celular [3], donde contribuye a la síntesis de fosfatidilcolina, un fosfolípido importante. Este papel se extiende a la síntesis de neurotransmisores, en particular la acetilcolina, que influye en la función cognitiva, la memoria y el control muscular. La colina es crucial para el metabolismo de los lípidos y contribuye al transporte de las grasas. La colina desempeña un papel importante en la reversión potencial del hígado graso no alcohólico y en la prevención de la esteatosis hepática.

Fuentes alimentarias y vías metabólicas

La colina dietética procede principalmente de productos animales como huevos, hígado, pescado y aves de corral. La colina también se encuentra en fuentes vegetales, pero en cantidades mucho menores. Estas fuentes vegetales incluyen las verduras crucíferas y las legumbres [5]. Cuando se digiere, la colina sufre una fosforilación para convertirse en fosfocolina y, a continuación, una metilación secuencial para formar betaína o se convierte en acetilcolina a través de la vía de Kennedy. El exceso de colina puede oxidarse a betaína, contribuyendo al metabolismo de la homocisteína.

Los huevos son una de las mejores fuentes dietéticas de colina. Un huevo puede contener unos 147 mg de colina, lo que equivale aproximadamente al 27% del valor diario de colina [8].

En Estados Unidos, aproximadamente la mitad de la colina que se consume en la dieta se encuentra en forma de fosfatidilcolina [6,7].

Valor diario recomendado

La FDA ha fijado el valor diario (VD) de colina en 550 mg al día [4]. Esto se aplica tanto a adultos como a niños (a partir de 4 años). El valor diario se basó en la ingesta adecuada de colina para la cobertura de la población [4].

La ingesta adecuada de colina es diferente del valor diario [4]. A partir de los 19 años, la ingesta diaria adecuada es de 550 mg para los hombres y de 425 mg para las mujeres. Para las mujeres embarazadas, la ingesta adecuada es de 425 mg, pero para las mujeres en periodo de lactancia es de 550 mg.

Suplementos nutricionales

La colina puede complementarse con varios tipos de suplementos nutricionales. Estos suplementos nutricionales suelen contener únicamente colina, pero también pueden contener vitaminas del complejo B o productos multivitamínicos/minerales [9].

Las cantidades típicas de colina en los suplementos nutricionales oscilan entre 10 mg y 250 mg.

Las formas de colina en los suplementos dietéticos incluyen el bitartrato de colina, la fosfatidilcolina y la lecitina.

Consecuencias para la salud de una ingesta inadecuada

La deficiencia de colina se manifiesta como un deterioro de la función hepática, daños musculares y déficits cognitivos. Las mujeres embarazadas son especialmente vulnerables a la deficiencia de colina debido a la mayor demanda fetal para el desarrollo neuronal.

Existen algunas variantes genéticas que afectan al metabolismo de la colina, lo que puede agravar la deficiencia de colina en esos individuos. Una variante genética comúnmente mencionada es la MTHFR.

Referencias